We will always try to update and open chapters as soon as possible every day. Thank you very much, readers, for always following the website!

Enamorándome de mi esposa provisoria

Capítulo 88
  • Background
    Font family
    Font size
    Line hieght
    Full frame
    No line breaks
  • Next Chapter

Capítulo 88

Al ver a Christopher, no pudo evitar decir:

– Chris, la proxima vez no hagas cosas con Charles-Sablendo a que se referia, él le dedicó

una leve sonrisa:

-Está bien.

-Le he dicho a Charles que haga ver que pasamos mucho tiempo separados, y que

anunciaremos nuestra ruptura un mes después para que el impacto sea menor para ti –

contó con expresión seria.

Christopher se sintió abatido. «¿Sigue sin querer involucrarse demasiado conmigo?>>

-De acuerdo -acato con voz ronca-. Lo que tú digas.

Queria adorarla y hacer lo que ella deseara.

Solo entonces Kathleen sonrió a gusto y le siguió hasta el banquete. Esta vez, Charles no

los siguió.

Como Kathleen acababa de regresar a Jadeborough, tenia que hacer muchos preparativos

para ella. Por lo tanto, solo fue Valerie.

La asistente habia recibido entrenamiento antes, asi que sabia lo que tenia que hacer

mientras estaba en el banquete con su jefa.

El banquete fue organizado por el socio comercial de Christopher.

Por casualidad, el anfitrión era el patrocinador del programa de variedades en el que ella

iba a participar.

La aparición de la pareja causó sensación inmediata. Para la gente de Jadeborough,

Kathleen no sólo era la ganadora del premio de la Academia a la mejor actriz, sino

también la ex esposa de Samuel.

Todo el mundo sabia de su boda con el pues fue la comidilla de la ciudad cuando ocurrió.

Por eso, cuando la vieron con Christopher, no pudieron evitar sentirse extraños. Después

de todo, eran primos.

El parentesco hacia las cosas aún más interesantes.

Por fortuna, Kathleen habia pensado en eso antes de volver, por lo que no le importó en

absoluto.

Follow on NovᴇlEnglish.nᴇt

-Señor Lawson-saludó Christopher a un hombre mientras llevaba a Kathleen del brazo.

James Lawson era un hombre regordete.

-Sr. Morris

-Sr Lawson, esta es Kathleen Johnson. Va a unirse al rodaje de «El restaurante fantastico

Christopher.

presento

– ¿De verdad? Este programa será sin duda muy interesante con la participación de una

actriz ganadora del Oscar-respondio James con una sonrisa. Pero Kathleen se sintió

avergonrada,

-Me esta halagando, señor Lawson. De hecho, todavia soy una novata a la que nadie

conoce.

-No sea humilde, senorita Johnson. Usted es muy popular ahora. ¿Quién no la conoce? -

dijo James con una media sonrisa.

Kathleen le respondió con una leve sonrisa.

-Senor Lawson, voy a enseñarle la casa -dijo Christopher.

-De acuerdo debido a su amabilidad y a su relación con Christopher, no trataria a Kathleen

como lo hacia con otras celebridades femeninas. Además, había oido que tenia una

cstrecha relación con el director general de Astra Entertainment, por lo que no se atrevia a

hacerle nada.

Llevandola al comedor, Christopher le dijo con una suave sonrisa:

– No te pongas nerviosa. No se atreven a ponerte las cosas difíciles cuando yo estoy

cerca. Ven. Come algo.

Ella suspiro y respondió:

-La verdad es que no pensaba que esta pelicula fuera a ganar un premio. Aunque estudie

interpretación, el director me encontró en la calle y me dio la oportunidad de actuar en

esta pelicula por accidente.

De hecho, al principio no tenia intención de ser una celebridad, pero después de pensarlo,

no tenía ninguna otra habilidad. Además, su hermano era el director general de Astra

Entertainment. Por lo tanto, no tuvo más remedio que debutar.

Ella también sabia lo que iba a enfrentar después de su debut. El hecho de que fuera la

exesposa de Samuel era suficiente para que otros hicieran un escándalo sobre ella. Por lo

tanto, estaba preparada desde el principio.

-Esto demuestra que eres capaz. -Christopher agarró un vaso de jugo de frutas para

Kathleen.

Tomándolo de él, ella lo bebió

-¿Qué quieres comer? Las actrices no pueden comer mucho por la noche, ¿verdad? –

pregunto con una leve sonrisa.

-Si. Sólo dame algunas verduras se encogió de hombros.

-Parece que es muy fácil alimentarte -bromeó Christopher.

– Por supuesto. Es una bendición casarse conmigo -contestó con entusiasmo. Siempre

habia sido burbujeante, adorable y nada aburrida.

Aunque hacia un año pasó por muchas cosas, logró superarlas.

La mención de casarse con ella trajo una mirada oscura a los ojos de Christopher

-Me pregunto si tendré ese placer -dijo de forma significativa. Kathleen, que se distrajo

con los pasteles de la mesa, no lo escuchó.

-¿Qué has dicho, Chris? – ladeola cabeza, con cara de pocos amigos.

-Nada -respondió con calma.

Kathleen fue a agarrar un trozo de tarta de fresa, pero las dos mujeres no se dieron cuenta

y chocaron con ella por accidente.

Al perder el equilibrio, cayo hacia atrás. Christopher extendió los brazos para atraparla,

pero alguien actuó más rápido que el

Un brazo largo y fuerte rodeó la delgada cintura de Kathleen mientras sus hombros

chocaban con el firme pecho de un hombre. La familiar y poderosa fragancia almizclada

de un hombre maduro llenó sus fosas nasales y entró en su torrente sanguineo.

–Ten cuidado. -La voz de Samuel era profunda y atractiva como un violonchelo.

Sorprendida, ella se fijó en la corbata púrpura oscura que rodeaba su cuello. Se zafó de

sus brazos y dio dos pasos hacia un lado.

Samuel sonrió. «Su cintura sigue siendo muy suave», pensó.

Follow on Novᴇl-Onlinᴇ.cᴏm

Christopher se interpuso entre ellos para protegerla. Ahora que ya no estaba emparentada

con Samuel, podia protegerla y no necesitaba estar atado a su identidad como primo.

A Samuel no le gustaba ver como otro protegia a Kathleen como si le perteneciera.

La miró, y su mano sostenia un pequeño plato con pastel de fresa y tarta de queso con

arándanos. Le seguían gustando las mismas cosas que cuando era más joven.

Kathleen se quedó sin palabras al ver el pastel de fresa en su plato, ya que la fresa se

habia caido del pastel.

-Toma. Tómala -Samuel le entregó un pequeño tenedor.

Kathleen frunció el ceño. Christopher también agarró un tenedor y dijo con una sonrisa:

-Adelante. Te comprare uno cada día si te gusta.

Kathleen tomó el tenedor de Christopher y respondió con una dulce sonrisa:

-De acuerdo.

Al ver eso, Samuel bajo la mano, con el corazón dolorido.

-Si te gusta, puedo pedirle a un chef de Michelin que te lo haga -ofreció con voz ronca.

Kathleen ni siquiera se molestó en mirarle.

Lo último que esperaba a su regreso a Jadeborough era que Samuel la molestara. Como

director general del Grupo Macari, no necesitaba rebajarse ante una mujer en absoluto.

Levantando la vista, Kathleen miro a su antiguo marido. Sus hermosos ojos eran

adorables, pero habia una mirada de distanciamiento en ellos.

-Esto es inapropiado, Sr. Macari. Puede causar malentendidos. – Kathleen sonaba fria.

A pesar de su dolor de corazon, Samuel preguntó con calma

–¿Qué malentendido se puede causar?

Kathleen frunció sus labios rojos:

–Ya no tenemos nada que ver el uno con el otro,

Samuel le dirigió una mirada significativa y dijo con voz atractiva:

– Kate, la abucla te echa mucho de menos.

«Yo tambien te echo de menos, penso. Sin embargo, no se atrevió a decir la última frase

porque teria que se disgustara

Claro, Kathleen también echaba de menos a Diana. En el último año, no se atrevió a

volver a visitarla por miedo a que Samuel la encontrara, asi que sólo llamaba en secreto.

-Encontrare tiempo para verla.

– De acuerdo. ¿Cuándo estarás libre? -Samuel tragó con fuerza, su nuez de Adán se agitó

hacia arriba y hacia abajo.